El futuro del país está en los jóvenes, y es por ello que numerosas familias a lo largo del país planean asegurarles una educación superior de calidad, así que comienzan a ahorrar desde muchos años de antelación para ese momento tan importante. Lo primero que se recomienda hacer es un pequeño y sencillo plan de ahorros que consiste en:
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Iniciar con montos pequeños. Estos varían dependiendo de los otros gastos que se tengan en el hogar.
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Invertir parte de los ahorros obtenidos. La capitalización del mismo puede asegurar un considerable aumento con los años.
Antes de iniciar con los ahorros, la mejor opción es solicitar uno de los microcréditos para que ese pequeño montón sea el adecuado para realizar el paso 2. Una vez se comience a ejecutar el plan, hay ciertos factores que se deben considerar, aunque esto dependerá de las posibles elecciones de carreras del hijo.
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Gastos personales: Independientemente de que universidad desee ir y de la posible carrera a elegir, se debe tomar en cuenta las cosas que usará como ordenador portátil, libros, papelería e incluso hasta el mismo traslado así la universidad quede cerca o lejos. Se debe tener un panorama de todos estos escenarios y más para asegurar que cuente con todo lo necesario para sus estudios.
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Tipo de universidad: Están las instituciones públicas y privadas, y hay que considerar cuál de estas dan la carrera que desee cursar para investigar sobre los beneficios de cada institución y demás cosas a fines. No solo conforme con esto, dependiendo de la carrera se necesitarán implementos extras y de uso personal. Hay algunas universidades que lo otorgan y otras no, así que se añade un factor extra en este aspecto.
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Programas: Casi todas las universidades cuentan con programas de intercambio al extranjero, sea de un periodo regular o por actividades extracurriculares de interés del estudiante. Estos programas pueden estar cubiertos hasta ciertos puntos, pero en otros no, así que si el hijo muestra interés por participar en los programas se debe contar con los ahorros necesarios.
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Estudios especializados: Hoy en día no solo basta contar con un solo título, es casi indispensable contar con una especialización. Aunque en este punto ya el hijo podría costearlo con su trabajo, pero no está de más brindar un poco de ayuda.
Comenzar con el plan de ahorro podrá asegurar que los factores mencionados estén más que cubiertos al momento que su hijo asista a la universidad. Con pequeños pasos se podrá compensar esa calidad de formación profesional que tendrá.
