La hiperinflación es un fenómeno económico hostil para el comprador al reducir notablemente su accesibilidad a ciertos productos lo que, en última instancia, es un perjuicio a su calidad de vida. La hiperinflación es una característica de entornos económicos riesgosos donde no es recomendable solicitar préstamos inmediatos ni otro tipo de financiación bancaria.
De la hiperinflación se desprenden múltiples consecuencias que, de alguna u otra forma, terminan por impactar tu estilo de vida. En las siguientes líneas hallarás más información sobre dos en específico.
Aumento acelerado de precios
El acelerado incremento de precios es el principal signo de la hiperinflación y el fenómeno que origina muchas de las consecuencias que las personas perciben. Costos de producción y materias primas son factores detrás del aumento de precios, pero hay otros que pueden ser más o menos influyentes que estos dos.
El comprador es gravemente afectado por el precio de los productos, su salario queda corto para todo lo que está acostumbrado a comprar, teniendo que priorizar los bienes más esenciales sobre aquellos menos vinculantes con su bienestar. La calidad de vida queda seriamente comprometida, siendo más difícil de proteger con el agravamiento de la hiperinflación.
Solamente puedes reducir el impacto de los aumentos en tu economía, no es un fenómeno sobre el que puedas actuar directamente ni que puedas evitar, pero estás en posición de prepararte y organizarte para que tú y tu familia superen la hiperinflación de manera más o menos satisfactoria.
Pérdida del poder adquisitivo
Tu poder adquisitivo disminuye frente al aumento de precios, deberás gastar más dinero para comprar la misma cantidad de artículos que conseguías con menos capital. Este es un signo de que la moneda de uso corriente se está debilitando, que no tiene la misma capacidad de compra que antes y que es necesaria una mayor cantidad de dinero para “suplir” la carencia.
Contar con múltiples fuentes de ingreso puede reponer tu poder adquisitivo, pero es una “solución” muy demandante y que quizás sea poco accesible para ti. No incluyas financiación bancaria entre tus ingresos alternativos, sea crédito rápido sin documentación o cualquier otro tipo, porque las deudas que traen consigo pueden complicar más tu situación.
Una divisa debilitada puede ser sustituida por otra en ciertos contextos, la moneda reemplazante entrará en circulación al contar con una capacidad de compra más alta que la moneda original, lo que pudiera generar la circulación simultánea de dos divisas. No obstante, es posible que el gobierno no reconozca la divisa reemplazante como de curso legal.
