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La preocupación de los bancos por la seguridad va en aumento debido a las altas tasas de delincuencia cibernética a la que están cada vez más expuestos, no sólo en sus negocios tradicionales sino también en las nuevas áreas de negocio que ofrecen a través de las tecnologías más recientes, razón por la que aumentarán un 20% sus gastos en seguridad en 2018, según afirma IDC.
Sin embargo, la inversión en seguridad por parte de las entidades bancarias está tomando nuevos rumbos respecto de los métodos tradicionales, tratando de obtener una mayor eficiencia, y un mejor comportamiento en las fases preventivas.
En este terreno adquieren especial importancia todos los procedimientos de seguridad basados en la biometría y en los métodos e autenticación de próxima generación, que permitirán a los bancos construir una “confianza digital” con sus clientes.
Los sistemas de identificación por biometría simplifican y hacen más seguros los procesos
Marc DeCastro, director de investigación de IDC Financial Insights afirma que tras el sistema de autentificación inteligente mediante la huella dactilar en el teléfono móvil, los bancos extenderán estos sistemas al reconocimiento facial y de voz.
Con ello se logra, además, eliminar los aspectos negativos que trae consigo el aumento de las contraseñas que debe recordar un cliente. “Los métodos de autenticación biométrica no solo ayudarán a simplificar los procesos de seguridad sino que, harán que esos procesos sean más seguros”, concluye.
