El olor es un factor que interviene mucho en un local comercial, ya que en ocasiones, este dependerá o contribuirá en el estado de ánimo de todo cliente que visite el negocio.
Es decir, si una persona entra en una tienda y esta huele bien, el individuo se verá tentado de avanzar, pasar más tiempo y realizar una compra, pero si ocurre todo lo contrario, no será muy favorable para el capital de dicho establecimiento debido a que el ciudadano no querrá pasar ni un segundo más en el sitio.
En la actualidad, existen muchas empresas que presentan un departamento de marketing olfativo en grandes espacios, como por ejemplo, centros comerciales.
El papel de esta estrategia es trasladar las fragancias aromáticas a diversas zonas de grandes superficies. Aunque se trate de áreas extensas, hay equipos específicos que tienen la capacidad de llevar estos olores a cada rincón comercial.
Una recomendación que hay que tener en cuenta en todo momento es que si se desea aromatizar un lugar amplio, los perfumes a usar deben ser cambiados con frecuencia, destacando que esto no aplica solo para los cambios de estaciones, sino también para el día o la noche.
Todo esto se consigue con equipos de aromatización.
