El pago de los impuestos de forma periódica es una obligación para todas aquellas personas que estén dadas de alta en Hacienda y ejerzan actividades profesionales por cuenta ajena o trabajando en la nómina de una empresa.
En la península es el IVA o el Impuesto sobre el Valor Añadido, mientras que en el caso de Canarias, debido a sus características fiscales especiales, es el IGIC o Impuesto General Indirecto Canario. En cualquiera de los dos casos, normalmente el ciudadano o la ciudadana tiene la obligación de abonar una cantidad concreta de dinero durante cuatro períodos distintos, siendo necesario consultar el calendario del contribuyente para hacerlo siempre en plazo.
Por lo general, los períodos son durante los meses de abril, julio, octubre y enero. Además, en enero se cierra el año fiscal, por lo tanto también es obligatorio presentar el resumen anual de los períodos anteriores.
En cuanto al porcentaje de pago, depende de la persona trabajadora, de su nivel de ingresos y de su ubicación. El IGIC, por ejemplo, es más fácil de asumir, ya que supone un 7%. De todos modos, las personas que no paguen algún período por motivos económicos porque el porcentaje es muy elevado, se arriesgan a una penalización.
Por ello es recomendable utilizar cualquier recurso disponible para no faltar a la fecha, como el uso de créditos rápidos sin mandar documentación de WannaCash.es para ese período concreto. Por otro lado, no solo es complicado, o más bien tedioso, el cálculo del porcentaje de pago de impuestos, sino la cumplimentación de los documentos y su entrega.
Normalmente se puede hacer acudiendo a la entidad bancaria de confianza y por cajero automático, pero hoy en día internet ha facilitado la opción de hacerlo desde casa mediante certificado electrónico y en la web de la Agencia Tributaria.
Desde casa, normalmente desde nuestra cuenta privada en el banco del que seamos clientes, también podemos gestionar nuestro dinero y la gestión de los préstamos online inmediatos, en caso de haberlos solicitado. En definitiva, es importante no dejar los impuestos para el último día, ya que hay muchos procesos y obligaciones que gestionar.
