Conversación tranquila de @jmfrancas con Maria Fuster (@FusterMaria). Yo he sido una militante con cargos en el PP que hace 10 años decidí trabajar en el sector privado para labrarme una profesión al margen de la política y poder mantener así mi independencia. Independencia que me llevó a pedir la dimisión de Rajoy, un congreso refundacional, etc. Y que, ante tal agotamiento, he decidido tomarme lo que espero sea un paréntesis en mi militancia en el PP.
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JMF: ¿Cómo ves la política actual en España?
Maria Fuster: Mediocre. Mediocre por la falta de perfiles profesionales entre los dirigentes de los partidos y mediocre porque los líderes de los principales partidos carecen de las aptitudes básicas necesarias para llegar a acuerdos, para dialogar.
JMF: La ha sido siempre no…
Maria Fuster: Totalmente de acuerdo en que siempre ha sido mediocre, pero en tiempos críticos se hace más notorio. Por ponerte un ejemplo. Cuando tu tienes un catarro, vas al médico de familia sin investigar su CV. Eso sí, cuando tienes una enfermedad grave intentas enterarte de quiénes son los mejores especialistas.
JMF: La legislación tampoco ayuda, hay mil incompatibilidades…
Maria Fuster: Eso es relativo. Al final ellos son los que se autorizan o no para solapar su cargos con otros trabajos. No conozco a 1 sólo diputado o senador que se haya quejado por querer desarrollar una actividad que la ley le prohíba.
JMF: Vivimos en un partitocracia…
Maria Fuster: Absolutamente cierto. Los partidos sólo se preocupan de sus votantes cuando tocan elecciones. Una vez tienen su acta de diputado, les importa un comino lo que prometieron o lo que les importa a los ciudadanos que representan. Por eso soy una firme defensora de las listas abiertas.
JMF: María son abiertas las del Senado y la gente vota el apellido que empieza por A.
Maria Fuster: El ejemplo del Senado no me vale. Primero porque parte de los senadores no son electos, los designa el gobierno autonómico de turno. Y los que elegimos nosotros, ¿alguna vez has visto que los senadores de los partidos hayan hecho campaña entre ellos? ¿algún senador se ha presentado alguna vez con programa propio para su región o acata lo que dice el partido? Son unas listas abiertas de república bananera.
JMF: Te doy la razón, son abiertas trampa. ¿Qué perfil debería tener un político no mediocre?
Maria Fuster: Por lo pronto estudios universitarios y por lo menos tener algunas nociones básicas de derecho. No podemos olvidarnos que su trabajo principal es legislar. Es vergonzoso la cantidad de proyectos de ley que se devuelven al Congreso por no ajustarse al derecho. Además creo que los grupos políticos deben tener un equilibrio entre políticos profesionales (esos que llevan toda la vida en el partido) y profesionales metidos a política temporalmente. (como por ejemplo De Guindos).
JMF: ¿No les obligarías a haber pasado por un Ayuntamiento?
Maria Fuster: No necesariamente. Ese criterio en todo caso es más relevante para los senadores, pero para los diputados no lo veo imprescindible.
JMF: ¿Y un test psicológico y de salud mental?
Maria Fuster: Eso me parece ir demasiado lejos. Lo que sí me parece fundamental es pedirles los antecedentes penales y las causas judiciales pendientes. Al Congreso y al Senado hay que entrar limpio como una patena.
JMF: Prescindiendo de su ideología, ¿me das algún nombre de político preparado?
Maria Fuster: Pregunta complicada. En el PP, Pablo Casado me parece que tiene un perfil muy completo académicamente, tiene idiomas y experiencia internacional. En Ciudadanos, Inés Arrimadas me gusta mucho: tiene dos carreras, habla cuatro idiomas y tiene experiencia como consultora. Una cosa que Ciudadanos está haciendo muy bien, a diferencia de Podemos, es ser savia nueva pero trayendo a gente preparada, con experiencia exitosa en el sector privado.
JMF: Noto ausencias significativas: Ni Rajoy, ni Sánchez, ni Rivera, ni Iglesias. ¿Se te han olvidado?
Maria Fuster: De los cuatro el único que podría salvar es a Rivera, aunque me da la sensación de que le falta algo de empaque. Un candidato a la presidencia del Gobierno en este siglo XXI requiere de un perfil y unas aptitudes que no veo ni en Sánchez, ni en Iglesias, ni en Rajoy. Me falta en los tres carisma, liderazgo y sentido de Estado.
JMF: María, Rajoy gana elecciones y parece eterno…
Maria Fuster: Rajoy no gana elecciones, las pierden sus rivales. Rajoy es una opción que se ha votado siempre por descarte. ¿A cuánta gente conoces que ha votado a Rajoy por miedo a Podemos o porque le ve la menos mala de las opciones? Le debería dar vergüenza amenazar si quiera con volver a presentarse.
JMF: Estás de baja temporal en el PP, ¿que le pasa al PP que lo has dejado?
Maria Fuster: Yo me afilié con 16 años. Me afilié porque mi madre es vasca y me nació la necesidad de colaborar con esa causa. Fueron años duros pero muy emocionantes. Pertenecía a un partido que me ilusionaba y que defendía mis ideas, mis principios mis valores, que compartía mis inquietudes. En el congreso del 2008 me llevé un golpe de realidad. Ví y viví la cara fea de la política. La ambición por el poder pura y dura. Lo que le hicieron a mi amiga María San Gil es imperdonable. Eso sumado a la segunda derrota de Rajoy y su renuncia a dimitir y dejar el paso a un equipo nuevo, me hizo perder ilusión. Luego llego la victoria de 2011, el gobierno con mayores cuotas de poder de nuestra democracia, y de ahí viene mi última y mayor decepción. Se olvidaron de todo lo que prometieron: ni se derogó la ley de memoria histórica, ni se centralizó la educación, ni hubo una reforma estructural de las Administraciones Públicas… Dejé de sentirme parte de ese conjunto.
JMF: Estamos en 2018… ya has tardado ¿no?
Maria Fuster: Decidí darme de baja hace unas semanas. Hace años que defiendo que el PP necesita un congreso refundacional por 2 motivos principalmente. Primero para hacer una limpieza real y romper con el estigma de partido corrupto. Y segundo, pero más importante, para volver a sus origines, a los principios y valores que se defendían de su fundación y que son los que nos representan e ilusionan a la mayoría de los militantes y de los votantes del PP. Cuando eso ocurra, me volveré a afiliar. Realmente me gusta pensar en esta baja como un paréntesis.
JMF: ¿Me dices entonces que el PP de Rajoy no es el PP?
Maria Fuster: Claro que no. Este es el PP de Rajoy y los cinco secuaces que le rodean. Es un partido de funcionarios y gestores que han dejado la política y los principios de lado. Hace mucho que la mayoría de los militantes y dirigentes piden primarias, democracia interna, vuelta a los valores y principios que son nuestra base.
JMF: ¿No es iluso hablar de democracia interna hoy en el PP?
Maria Fuster: A día de hoy es inviable. De ahí mi decisión de darme de baja. El partido y sus órganos están absolutamente controlados por el aparato.
JMF: ¿Entiendes a los cargos del PP que se están yendo a Ciudadanos?
Maria Fuster: Claro que lo entiendo. El hartazgo que tenemos muchos militantes del PP es inimaginable para la gente que está fuera. A nosotros nos ha dolido más que a nadie la corrupción porque ha sido un golpe doble por el delito en sí y por la decepción, el cabreo y la vergüenza que supone que lo hagan los tuyos.
JMF: Hay quien dice que o Rajoy se va, o se lleva al PP por delante…
Maria Fuster: Es que yo creo que Rajoy ha decidido irse llevándose el partido por delante. Parece que ha decidido morir matando. No hace falta ser un experto analista para entender que el hecho de que el PP siga bajando en todas las encuestas, continúe con esta fuga de votantes y de afiliados, es síntoma de que ofrecen un proyecto que cada vez convence menos y a menos personas. Y ante eso, en lugar de anunciar cambios, Rajoy anuncia que se quiere volver a presentar. ¿Necesitas mayor prueba que esas declaraciones?
JMF: María, ¿cómo ves hoy la cuestión catalana?
Maria Fuster: Pues como todo el mundo: muy complicada. El Estado ha hecho una dejación de funciones absoluta en estos últimos 12-14 años. Se han equivocado todos. Zapatero abriendo por iniciativa propia el melón de los estatutos de autonomía, Rajoy no centralizando la educación en 2011, el PSC jugando a ser nacionalista, el PP no definiéndose cambiando de candidato y por lo tanto de criterio cada 2 años, etc. Lo más grave de esto es que es un problema que ahora divide y enfrenta a los ciudadanos, a los catalanes pero también al resto de los españoles, y que es un problema que han generado los propios políticos para justificar su trabajo, para dar respuesta a sus ambiciones más personales y para esconder sus mediocres gestiones.
JMF: Gracias Maria, hay tema y dará para seguir hablando.
Maria Fuster: Un placer.
