Conversación tranquila de @jmfrancas con Asís Timermans (@AsisTimermans). Jurista, analista político y colaborador en distintos medios de comunicación como 13TV, Libertad Digital, Es Radio e Intereconomía.
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JMF: ¿Cómo ves el panorama político hoy?
Asís Timermans: A la vez apasionante y dramático. Creo que, de alguna forma, todos los errores, cesiones e irresponsabilidades de la transición y el régimen político del 78 se han alineado y amenazan con romperlo. Por otra parte, lo mejor de esa misma España puede estar asomándose. Lo mejor, para mí, es esa reacción espontánea y masiva en Cataluña, como la que este 12 de octubre llenó las calles de Barcelona
JMF: ¿La sociedad civil se esta despertando?
Asís Timermans: Sin duda. El tan mencionado desapego de la gente con la clase política no solo es mayor que nunca, sino que la gente se ha dado cuenta de que movilizarse puede dar frutos, Cuanto más se acerca la negociación con los derechos de los catalanes, más se manifiesta su deseo de ser libres sin concesiones. Suena a frase hecha, pero lo viven muchos ciudadanos cada día. Ciudadanos que ni siquiera se interesaban por la política y ahora reivindican su capacidad de ser libres en su comunidad de vecinos, por ejemplo. Ese «despertar» puede adoptar distintas formas, y dar lugar a cosas buenas y malas. Pero es positivo: los políticos ya no pueden hacer lo que quieran y venderlo de la mejor forma posible, Hay mucha gente que es consiente de que su interés y el de los partidos políticos no es el mismo.
JMF: Lo que pasa es que del dicho al hecho hay un trecho y me cuesta verlos influir sin la política…
Asís Timermans: Al menos dificulta «soluciones prefabricadas». Ahora, los partidos no pueden sentarse en una mesa, decidir cómo «tirar hacia delante», y dárselo a la gente con un bonito envoltorio. Los grandes se dan cuenta, y si no escuchan a la gente y fomentan el debate, partidos hoy marginales tomarán gran relevancia para bien y para mal.
JMF: Te noto optimista…
Asís Timermans: ¡Uf! Creo que aprendí en casa a no ser optimista, pero a actuar como si lo fuera. Veo muy difícil un futuro bueno a medio plazo para España, porque casi cualquier área que examine (educación, instituciones, cultura, familia…) e parece deteriorada y en declive. Sin embargo, veo reacciones aisladas pero decididas. No me imagino cómo va a ser posible que España remonte este deterioro social generalizado, pero quiero creer que sucederá.
JMF: ¿Cómo ves a Sánchez?
Asís Timermans: No soy muy objetivo, porque conozco personalmente su entorno y su génesis, e incluso le conocí a él hace tiempo. Ello me hace tener una percepción muy poco ilusionante. Si me preguntas por su solidez, su proyecto político o la confianza en que pueda tomar decisiones acertadas para España, no soy optimista. Si lo que preguntas es cómo veo su capacidad para adaptarse, sobrevivir, cambiar de postura e incluso tomar decisiones acertadas para la economía y la política obligado por las circunstancias o los pactos, entonces sí: Sánchez es capaz de todo lo bueno y lo malo. Tiene pocos principios y ningún escrúpulo. Es capaz de cualquier cosa. EL problema es el PSOE. Creo que es el gran problema. Hasta hace poco, te habría dicho que el PSOE es un problema para España. Ahora, ignoro si el PSOE existe como partido serio.
JMF: Las siglas existen… e influyen y nos gobiernan…
Asís Timermans: Sí, las siglas existen, y el aparato. Pero las depuraciones y los bandazos del PSOE, y la radicalización de las bases, han convertido lo que era una organización política algo dinámica en una simple máquina de poder. Sé que eso se puede predicar de otras formaciones. Pero el problema es lo que llamo la «formación sentimental» del militante socialista, que es extremadamente maniquea y simplista. EL militante del PSOE actual se cree la maldad intrínseca de «la Derecha», y la bondad intrínseca del socialismo, Ello justifica literalmente todo con tal de perjudicar a esa Derecha.
JMF: ¿Sacará adelante los presupuestos?
Asís Timermans: No sé si los sacará adelante. Los partidos que auparon a Sánchez a la Presidencia del gobierno saben que tener a un Presidente tan frágil es una oportunidad para ellos, Por eso, intentaran mantener la situación aprobando, en su caso, esos Presupuestos. Aún así, veo difícil que se aprueben. No ya por el texto en sí o la inviabilidad de las medidas acordadas con Podemos, sino por la inestabilidad política de quien los presenta.
JMF: Y de Iglesias, ¿qué opinas?
Asís Timermans: Pese a que el fenómeno Podemos dejó hace tiempo de ser nuevo y deslumbrante, su éxito relativo es indiscutible, Podemos es Iglesias, e Iglesias, pese a su mansión y sus mentiras, sigue siendo un enfermo del poder y del odio cuyo objetivo principal es sustituir al PSOE. Creo que si no entendemos ese objetivo -sustituir al PSOE como fuerza hegemónica en la izquierda por un partido neocomunista- no entenderemos las decisiones de Iglesias. Él renuncia a quedarse en un 20%, ese límite tradicional de la extrema izquierda. Nunca se ha visto la extrema izquierda en España con una fuerza de 70 diputados en el Parlamento. Eso, en una situación política tan inestable, es muy peligroso. Mucho.
JMF: Yo entiendo lo de ‘comerse’ al PSOE pero, ¿lo entiende Sánchez y su camarilla joven?
Asís Timermans: Supongo que uno siempre cree que puede dominar a la bestia, sobre todo si no tiene principios… Y también imagino que Sánchez y su camarilla no creen posible que una organización como el PSOE pueda verse en peligro por un fenómeno como Podemos. Yo lo que señalo no es la probabilidad de que eso suceda, sino un elemento para interpretar las decisiones de Iglesias: no es el PCE ni la Izquierda Unida tradicional, que no se creían capaces de cambiar un régimen ni sustituir al PSOE. Iglesias supeditará cualquier decisión a ese objetivo. Si un día ese siniestro y adolescente grupo de Iglesias y Monedero es desbancado de Podemos, se convertirá en otra cosa. Por ser mas concreto: creo que Sánchez y su camarilla no son del todo conscientes del peligro de Podemos para ellos. Quizá acierten, y el que me equivoque sea yo… Pero el PSOE me importa poco. Me importa la sociedad española, que está en una clara encrucijada.
JMF: ¿Por qué dices ‘siniestro’ cuando hablas de Iglesias y Monedero?
Asís Timermans: Quizá es un problema personal mío: he estudiado y observado a Iglesias y Monedero, y creo que tienen poco que ver con cierta izquierda radical utópica de España. Ellos no solo postularon la bondad de los peores dictadores de la historia: experimentaron en persona las tiranías, y se dejaron seducir por ellas. «Cabalgaron contradicciones», como dijo Iglesias. Y esas contradicciones son siniestras: su apoyo y complicidad con la narcodictadura chavista es real. Su colaboración con el Estado iraní también. No es algo teórico o inocente: se han atrevido a pedir dinero y colaborar con asesinos como Chaves y Maduro, y a establecer una colaboración permanente con la televisión iraní. Ellos saben perfectamente de los crímenes de unos y otros, pero les parecen asumibles si son útiles para la causa. Hace tiempo, un dirigente de Izquierda Unida con el que tengo una buena relación me decía, como elogio, en tono de broma: «Tú eres de los primeros a los que fusilaríamos de llegar al poder». Lo decía en broma. Iglesias y Monedero no, porque ellos han vivido y envidiado un régimen que perseguía y mataba opositores políticos. Son siniestros. Aunque decirlo pueda sonar extremista o chirriante.
JMF: Ante este panorama de la izquierda, ¿Cómo ves al PP de Casado?
Asís Timermans: Reconozco que Casado me ha sorprendido. Su batalla por la presidencia del PP contra Sáenz de Santamaría se planteó como la ilusión y las ideas contra el Poder. ¡Y ganó! Su discurso público está confirmando esa intención: la de convertir al PP en eso que solía llamarse «liberal conservador». ¿Es eso sensato o posible en una derecha desideologizada, que solo se distingue de la socialdemocracia en su sentido nacional? No lo sé. Pero España está en una encrucijada, tanto en lo ideológico -estatalismo vs libertad individual- como en su sentido nacional, Quizá impulsar nuevamente esas ideas sea mejor para España que para el propio PP. Pero hay que hacerlo. Alguien tiene que hablar desde la moderación y lo institucional del libre mercado como esencia de la prosperidad, de la libertad individual como valor superior, y de los límites del Poder como salvaguarda imprescindible de la democracia. Eso parece querer hacerlo Casado, y tiene capacidad para hacerlo. Por eso «le perdono» -perdone la expresión pretenciosa- que aún cuente con personas como Maíllo, Maroto o Juan Manuel Moreno para un proyecto tan distinto y opuesto a lo que fue el de Rajoy. Quizá no tiene otro remedio.
JMF: Y ya puestos, ¿que piensas del liberal Rivera?
Asís Timermans: ¿Liberal? ¿Dónde? Bien, ahora en serio… Yo respeto a Rivera por lo que supuso de activación de la resistencia pública frente al nacionalismo. La salida de la clandestinidad de cierto «no nacionalismo» en Cataluña se lo debemos en parte a Ciudadanos. También Rivera ha sido importante para luchar contra ese monopolio de la representación de los catalanes en Madrid que detentan los nacionalistas. Me ha decepcionado cierto conformismo en una aceptación de cierto status quo que al principio rechazaba, pero las decepciones en la política y en el amor son solo cuestión de tiempo… Rivera me parece un político con principios sólidos, pero no con ideas sólidas. Ese es, creo, su diferencia con Casado, mucho más formado en unos principios políticos que yo comparto.
JMF: Muchas gracias Asís, has hecho un repaso al espectro político que nos afecta, ¿me dejo algo que te apetezca destacar?
Asís Timermans: Bueno… Quizá dos cosas. La primera es que creo que estamos pagando algunos errores y frivolidades cometidos desde la transición, y sería bueno revisar algunas concepciones que se «cedieron» a la izquierda y los nacionalistas para apaciguarles. Sin un rearme ideológico de los principios liberales y la la idea nacional, será difícil mejorar en esos aspectos. Por último, quiero destacar el papel del Rey. En mi modesta opinión, ser monárquico o republicano es una tontería, porque en absoluto implica principios políticos distintos. Por eso, solo quiero señalar que el Rey, como figura moderadora, entendió que su papel era defender la Constitución, y a ello se limitó. Eso se concretó en expresar una defensa de la libertad y de la nación, sin las cuales ni hay Rey ni Constitución. Hoy, los mejores españoles están donde es más costoso serlo; en Cataluña. Ellos saben como ninguno que el Rey representa su libertad y su posibilidad de ser libres frente a la imposición nacionalista. Eso representa hoy el Rey: la libertad y España.
JMF: Gracias Asís, queda dicho. Un abrazo, mil gracias y hasta pronto.
Asís Timermans: Muchísimas gracias a ti. Sí en cualquier otro tipo de cosa crees que te puedo ser útil no dudes en llamarme.
