*A los Merideños y al País*
La situación económica, política, social y moral por la que estamos atravesando puesta de manifiesto en: el desmembramiento de las familias, la desesperanza, la ruina del país y de sus habitantes, la lucha constante para conseguir las medicinas y los productos de primera necesidad, el estado de postración de las universidades, liceos, colegios y escuelas, las fallas constantes del sistema eléctrico, el abandono del campo y de la agroindustria, la destrucción de la infraestructura vial y de la pequeña y mediana industria, la desaparición del bolívar y la libre circulación del dólar, la corrupción generalizada, la violación sistemática de los derechos humanos, la militarización del control del Estado, la institucionalización inaceptable del paralelismo en el ejercicio del poder, la quiebra de PDVSA que obliga al venezolano a hacer largas e interminables colas para surtir gasolina y además, convierte en una odisea estresante la obtención del gas doméstico, la combinación tenebrosa de los sueldos y salarios más bajos del mundo y la hiperinflación más alta del planeta y la inseguridad personal y jurídica; nos obliga ética y moralmente como ciudadanos responsables, a pensar sobre la necesidad urgente de un cambio en el sistema de gobierno del país para enrumbarlo lo más pronto posible, por los caminos del progreso y del desarrollo ya transitados con anterioridad.
Reconocemos que se han cometido errores, que en muchas oportunidades los mensajes enviados a la población han sido contradictorios, que se ha incurrido en la descalificación, en el rechazo y hasta en manifestaciones de odio a quienes piensan distinto, negando la pluralidad y la diversidad, características de los sistemas democráticos, que se ha retrocedido en el campo de los valores democráticos, que se ha desvalorizado el voto como instrumento de cambio efectivo o de punto de inflexión, que la lucha por lograr mejores condiciones electorales no ha sido efectiva, que las decisiones tomadas por la dirigencia no han sido las más afortunadas y que en ocasiones irresponsablemente se le han vendido al pueblo mecanismos y salidas que han sido un salto al vacío.
Entendemos la situación calamitosa que estamos viviendo y lamentamos que al ciudadano lo hayan llevado a un estado de dependencia, de desesperanza, de incredulidad, de postración, de incertidumbre, de creer que no hay salida, de pensar que es mejor quedarse en la casa, que dar la pelea en el terreno que el régimen de Maduro la plantee, mientras se consiguen mejores condiciones y nos fortalecemos como una opción clara frente al régimen.
Lamentamos que las elecciones del 6D algunos sectores las convirtieron en un acto de linchamiento moral y político de los que ayer eran sus compañeros de luchas y que transformaron por arte de la manipulación, el engaño, la conveniencia, la falta de madurez política, y por sus intereses grupales, partidistas y sectarios, en enemigos que había que destruir, sin importar que Nicolás Maduro se quedara con la mayoría determinante en la AN, o que unos meses después con peores condiciones electorales, buscaran el favor del pueblo en las urnas.
Como ciudadanos responsables, comprometidos con el pueblo venezolano y especialmente con el merideño hemos decidido impulsar desde el estado Mérida un gran movimiento político-social de unidad nacional sin exclusiones, sin rencores, con mucho dialogo y con determinación y valentía, para organizar a la ciudadanía, acompañarla en sus reclamos más urgentes, retomar el camino extraviado de la política, y conquistar los espacios de poder para fortalecernos de nuevo, volver a las calles, ayudar a resolver las diversas crisis y salir del régimen de Nicolás Maduro, tan pronto como sea posible, por la vía cívica, pacífica y democrática.
Desde la ciudad de las nieves eternas le hacemos un llamado a la dirigencia nacional de los partidos políticos, a los gremios, a los sindicatos, a los empresarios, a los trabajadores, a las amas de casa y al país en general, a rescatar la esperanza, a construir en los estados, los municipios y las parroquias este gran frente de unidad nacional para volver a la política, rescatar los espacios abandonados, organizar a la ciudadanía, participar con el pueblo en sus reclamos de diversa índole y cooperar con nuestro trabajo e inteligencia con los sectores productivos para enrumbar la economía.
En Mérida hemos comenzado a construir este frente con organizaciones políticas que participaron el 6D, con representantes de gremios y sindicatos y con algunas organizaciones que no participaron el 6D y que se han ido incorporando.
Te invitamos a participar en esta iniciativa; que nos ayudes desde tu barrio, parroquia, a concretar los objetivos mencionados anteriormente por el bienestar de los merideños y de los venezolanos en general.
*Por el Frente de Unidad Nacional Merideño*
*#ParaSalvarAMérida*
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